martes, 14 de julio de 2009

confesións



Desde hace tres años lo único que quería gritarme a mí misma era: cobarde, covarde, covard, sukur, coward, vigliacco, lâche, feigling, covarde, mesig, frygstom, raukka, schórz...

Pero ahora lo único que quiero gritar sobre mí es: valiente, valente, valent, ausart, brave, coraggioso, courageuse, tapfer, valiente, modig, miehuullinen, awanturniczy, EGO SUM FORTIS!!



Gracias! Gracias por llamarme, por permitirme explicarme, por dejarme hablar sin interrumpir, por sonreír al otro lado del teléfono, por hacerme sentir un abrazo a mil doscientos kilómetros de distancia, por no herirme, por entender y comprender lo que mi voz te explicaba sin necesidad de repetirlo, por pillarlo todo a la primera... Por cambiar de tema sólo cuando ya no había nada más que decir, o no quería decir nada más, por no humillarme, por prometérmelo y por la sinceridad de tu voz, por percibir que mi corazón estaba saliendo por mi boca, por entender que una palabra diferente a las que pronunciaste me lastimaría... Sólo quiero agradecerte que me hayas dejado ver a la persona que creía perdida desde hace años, por hacerme sentir que esa persona estaría ahí, por hacerme sonreír, cuando lo más fácil habría sido hacerme llorar... Gracias por tender la mano, no la que yo deseaba, pero sí la que me aferra a la cordura...

Hoy me he dado cuenta de que te quiero, con todo lo que has cambiado, y me doy cuenta de que no hay nada malo en eso, me doy cuenta de que ha sido para mejor, has crecido, has madurado, y, como a los vinos, el reposo te ha hecho más sabio... Ahora ya no tengo nada que hacer, porque me doy cuenta de que te quiero, tú lo sabes, desde hoy ya lo sabes, y de que te quiero más que nunca por tu manera de ver el mundo y por la manera en que hacer que yo lo veo.

Te quiero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario